La vanidad como ejemplo de libertad,
Tu mirada como distancia a los demás,
El encanto de vivir como nuestra arma secreta
Y nuestras mentes como abanicos escondidos.
Para que hablar de ideologías,
Si impregnado en mis ojos esta el aroma,
El aroma de creer en lo utópicamente real
Y en lo realmente utópico.
El peligro de vivir,
El placer de despertar cada mañana,
El encanto de tenerte a mi lado,
Las ganas de que construyamos nuevos tiempos.
Hablándome me pido no olvidarme a causa de ti:
De nunca cerrar los ojos, porque en la realidad esta lo hermoso.
En no perder mis horizonte porque en ti creo.
En no embalsamar mi mente y recordar el peligro de vivir.
En saber que mi final no esta contigo, pero rogándote que me acompañes.
Tu mirada como distancia a los demás,
El encanto de vivir como nuestra arma secreta
Y nuestras mentes como abanicos escondidos.
Para que hablar de ideologías,
Si impregnado en mis ojos esta el aroma,
El aroma de creer en lo utópicamente real
Y en lo realmente utópico.
El peligro de vivir,
El placer de despertar cada mañana,
El encanto de tenerte a mi lado,
Las ganas de que construyamos nuevos tiempos.
Hablándome me pido no olvidarme a causa de ti:
De nunca cerrar los ojos, porque en la realidad esta lo hermoso.
En no perder mis horizonte porque en ti creo.
En no embalsamar mi mente y recordar el peligro de vivir.
En saber que mi final no esta contigo, pero rogándote que me acompañes.